¿Por qué Realidad Empoderada es una acción social?

Acción social Realidad Empoderada

Gus, a través de una ardua trilogía sobre ética, desarrolla el problema que existe entre definir “proyecto” de una “acción social”. Pues, a pesar de encontrar similitudes, la realidad es que estas dos palabras describen procesos completamente diferentes. Por una parte, “proyecto”, se basa principalmente en una proyección de ideales, pues nace desde un modelo en el que el poder rescata las principales características de la hegemonía. Es decir, se dirige a un desarrollo excluyente.

De esta manera, lo que busca un “proyecto” es una relación vertical, en la cual las relaciones de poder entre opresor y oprimido son demarcadas e incluso, la ideología que está en la cima tiene como objetivo conformar a los oprimidos en un solo marco de comprensión. Consecuencia de esto, es la manera en la que se configuran los proyectos tecnológicos, pues estos son realizados desde ciertos marcos sociales, políticos, económicos e incluso, culturales.

Ya que, como recupera acertadamente Gus, «sus recomendaciones y mandatos jerarquizan y privilegian las tendencias tecnológicas o sociales vinculadas con el grupo de interés comunes que lo solventan». Ante está demarcación, lo que busca Realidad empoderada, no es introducir una relación entre opresor y oprimido, pues su objetivo no es proyectar los ideales de un solo sujeto a una comunidad. El objetivo es observar la pluralidad de los individuos para integrarnos en una labor colectiva y, propiamente, en una acción social.

Antes de pasar con la demarcación de “acción social”, es importante resaltar que el proyecto está basado en la proyección de ideales individuales con el fin de conformar a una comunidad, por ello, es que la mayoría de las personas sienten esa indiferencia ante la marginación de personas que son excluidas al no entrar en los criterios hegemónicos que se poyectan; pues siempre se dirige a un desarrollo excluyente.

La acción social, por el contrario, tiene el objetivo (desde una praxis) de desarrollar la pluralidad de todas las personas desde el acompañamiento, sitio en el que se establece una relación horizontal capaz de incluir a los relegados por las proyecciones de unos pocos.

Al planear una acción social, debe de realizarse desde la praxis comunitaria (sitio en el que todos los agentes conviven). De ello que la acción social se diferencie de un proyecto, ya que, dentro de la primera, se busca romper estos lazos de opresión. No hay una hegemonía ni una conformación entre los pensamientos de la comunidad, es decir, nace el acompañamiento solo a treves de la acción social.  De esta manera se comparten experiencias mutuas de ida y vuelta o, en otras palabras, se es visto e incluso, escuchado desde la igualdad.

Pero, específicamente, ¿cómo surgen las acciones basadas en una praxis social? Sus bases son claras, siempre se realiza desde un acercamiento horizontal, pues lo que pretende esta acción social, es romper con la falacia del paternalismo, ya que, la labor de quien realiza dicha acción es ser acompañante, es decir, ir hombro con hombro.

Pues, «toda relación entre dos personas requiere de un aprendizaje. De aproximación a los sentimientos del otro, y las esperanzas del otro. Dentro de estas esperanzas, los deseos pueden cambiar dinámicamente por la intención de ambos. Una historia a trazar que puede comenzar a tener otros desenlaces o rumbos”.

En consecuencia, Realidad empoderada, no pretende ser un proyecto que descanse sus fuerzas en la nula actividad de acompañar. De ello, que más vale referirnos a este trabajo como una acción social, ya que, «surge de la convivencia y las necesidades de la comunidad marginada. […], donde se tiene que tomar acciones concretas basándose en las necesidades y correcciones necesarias para poder hacer un camino en continua aproximación hacia el establecimiento de una sociedad más justa».


Fuentes:

G. Reimondo, “¿La ética como motor de los proyectos o de acciones responsables?” Tecnología Humanizada núm. 1 del 2022.

G. Reimondo, “¿La ética como motor de los proyectos o de acciones responsables? Parte dos.” Tecnología Humanizada núm. 2 del 2022.

G. Reimondo, “¿La ética como motor de los proyectos o de acciones responsables? Parte tres.” Tecnología Humanizada núm. 3 del 2022.

Acerca de Cristian Hernandez Olmera 1 Articles
Mi nombre es Cristian, actualmente soy estudiante de filosofía y poseo una fuerte convicción: hacer de nuestra realidad un mundo donde la justicia y el amor sean los valores que predominen. La búsqueda por el bien es la única tarea que tengo en mente por realizar y, hasta que no vea ese sueño realizado, dedicaré mi vida para crear las condiciones y espacios de igualdad. Un mundo mejor si es posible.

Be the first to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo no será publicada.


*